Una inesperada concentración vandálica se salda con graves altercados que causaron daños en el entorno urbano de Iznájar

Los vecinos de Iznájar continúan hoy recuperándose del sobresalto ocasionado durante la madrugada del pasado domingo cuando, según información facilitada a TV Centro Andalucía por el Ayuntamiento del municipio, más de dos centenares de jóvenes perturbaron su habitual tranquilidad con una serie actos vandálicos que convirtieron el centro urbano en un auténtico campo de batalla. Unos hechos que se iniciaron tras la medianoche cuando de manera inesperada un nutrido grupo de personas que hacían botellón a las afueras del pueblo decidieron adentrarse en el centro histórico, tanto a pie como a bordo de vehículos, causando todo tipo de daños en propiedades públicas y privadas así como alterando el descanso de los vecinos.
 
La repercusión de estos incidentes entre la población local llevó este mediodía tanto al alcalde, Lope Ruiz, como al jefe de la Policía Local, Manuel Campillos, a rendir públicas explicaciones mostrándose “consternados” ante una situación que consideraron “puntual” en un pueblo nada acostumbrado a este tipo de altercados. Suciedad, cristales rotos, reyertas, colisiones de vehículos contra inmuebles, asaltos a obras con la puesta en funcionamiento de maquinaria  y notables desperfectos en el mobiliario urbano -que aún no han sido cuantificados por la Administración local- que provocaron que muchos iznajeños no consiguieran conciliar el sueño. “En lenguaje llano, fue una concentración de lo más granado que tenemos en los pueblos de alrededor”, indicó el máximo responsable municipal.
 
Otro de los factores que pudo dar alas a esta escalada de vandalismo fue la ausencia de efectivos de seguridad, tanto de la Policía Local como de la Guardia Civil. “Tras el aviso la patrulla tardó más de tres horas en llegar”, afirmó el regidor quien el pasado lunes puso en conocimiento de esta circunstancia tanto al mando a cargo del Cuartel de Priego como al subdelegado del Gobierno en Córdoba, Juan José Primo, recibiendo de ambos responsables “el compromiso de que no volverá a suceder algo así”. Respecto al Cuerpo local, Ruiz explicó que precisamente el sábado “se decidió suspender la guardia de noche” ante la avalancha de eventos deportivos y lúdicos que quedan por celebrarse en la localidad durante el verano y para cuyo normal desarrollo requieren de la totalidad de la plantilla policial, hasta un total de seis efectivos. “Nada hacía prever que esto llegara a suceder”, comentó, adelantando que a raíz de estos acontecimientos el Consistorio estudiará fórmulas para reforzar las medidas de seguridad durante los fines de semana en el casco urbano.
 
Una situación de riesgo que incluso pudo acabar peor ya que con los primeros rayos del sol unos 35 individuos trasladaron la fiesta a la playa de Valdearenas donde los incívicos “casi agreden al agente que entró de turno” y que acudió al lugar alertado por los ciudadanos que allí residen puesto que “estaban desfasados y en un estado lamentable”, declaró el responsable policial.
 
Aunque la investigación sigue abierta ya se han identificado a 25 individuos naturales de poblaciones limítrofes como Villanueva de Tapia, Archidona o Villanueva de Algaidas en la provincia de Málaga, al igual que otro procedente de la localidad cordobesa de Benamejí contra los que se han interpuesto denuncias por alteración del orden público. Las autoridades sospechan que podría tratarse de grupos de jóvenes, algunos con antecedentes penales, que a través de las redes sociales suelen concertar quedadas similares durante los fines de semana en poblaciones del centro de Andalucía, generalmente pequeñas.
 
FUENTE: TV CENTRO ANDALUCÍA